El proceso
En un procedimiento de serrado de pared, lo ideal es realizar un corte continuo de exactamente 0,8 cm (8 mm) de grosor en la junta más baja de la mampostería utilizando una sierra de mampostería. Este corte se rellena inmediatamente con las cuñas aislantes (también de 8 mm de grosor) de plástico PEAD.
Para ello, se coloca la cuña inferior y se introduce a presión la cuña superior. El efecto de las cuñas vuelve a garantizar de inmediato la resistencia de la ranura del corte a fuerzas externas en toda su longitud. La ranura de corte puede soportar de nuevo directamente cualquier carga.
Respetando el ángulo de distribución de la carga de 60º, el corte en el muro puede continuarse sin problemas.
Durante el montaje posterior, la capa de cuña inferior se inserta a ras de la capa de cuña anterior. A continuación, la capa de cuñas superior se introduce a martillazos a ras de la unión de las dos capas de cuñas inferiores.
Las dimensiones longitudinales de las cuñas aislantes se seleccionan de forma que se creen ranuras de drenaje cónicas en forma de cuña en todo el grosor de la pared cuando se enrasan con la capa de cuñas anterior. Estas ranuras de drenaje permiten que el agua del sistema capilar situado por encima de la junta cortada se escurra a través de la pendiente de la capa inferior de cuñas y no tenga que drenarse a través de las superficies de la pared, lo que requiere mucho tiempo.
Pasado un tiempo, cuando el agua capilar, si la hubiera, haya sido evacuada mediante este sistema de drenaje, se puede cerrar la ranura de corte (con las cuñas de aislamiento) a partir de un mortero flexible adecuado, es decir, que por un lado tenga una alta capacidad de pegado y adherencia y, por otro, cumpla los requisitos de resistencia a la tracción, elasticidad y transpirabilidad del vapor.
Sin embargo, cabe mencionar que antes de realizar el primer corte con sierra, llevamos a cabo algo parecido a una radiografía de la pared o de la zona donde estamos interviniendo y escaneamos dicha zona con p. ej. el Bosch D-tect 150 Professional. Con este escáner somos capaces de detectar todas las tuberías, cables eléctricos, etc., hasta una profundidad de 12 cm. De esta forma evitamos sorpresas desagradables y podemos planificar las medidas adecuadas con antelación.